En verano el calor, la humedad y la exposición de la piel son la combinación perfecta para el ataque de los mosquitos y sus molestas consecuencias.
Expertos en entomología de la Universidad de Florida llegaron a interesantes conclusiones sobre algo que sufren muchas personas durante el verano, las picaduras de mosquito. Éstas ocurren cuando el mosquito hembra sondea la piel con su boca y encuentra un lecho capilar cerca de la superficie de la piel de un ser humano y libera saliva debajo de ella.
La saliva contiene proteínas que el sistema inmunológico de la persona percibe como sustancias extrañas y de forma inmediata responde a través del abultamiento de la piel y el escozor de la misma.
Rascarse una picadura de mosquito podría parecer inofensivo, pero tendría consecuencias más serias.
Por eso, la aplicación de Pasta de Lassar, es un auxiliar importante para tratar las picaduras ya que su acción antiprurítica evita la urgencia de rascarlas y empeorar así su condición. Además, alivia al contacto y su acción antiséptica ayuda a evitar infecciones.
El verano se disfruta más, cuando se está prevenido con Pasta de Lassar.